Bret Hart habla sobre cómo Puerto Rico influyó en su carrera

Bret Hart le reveló a Michael Morales Torres de Lucha Libre Online la promesa que se hizo a sí mismo que cambió su carrera, el momento en que decidió convertirse en luchador y sus humildes comienzos.

Bret Hart: “Ha sido realmente especial venir aquí. Ver muchas caras viejas y muchos amigos como Savio Vega y ver a Hugo y ver a los hermanos Peron y Barrabas, todos los tipos que trabajaron para mí y para mi papá en Canadá. Y tengo tantos recuerdos diferentes con esos hombres que se remontan a mucho tiempo atrás, como cuando yo era solo un niño delgado en Canadá, pero amo a esos tipos. Tengo mucho respeto por los luchadores puertorriqueños y los luchadores con los que trabajé a lo largo de mi carrera. Siempre son los mejores para tener a tu lado y siempre profesionales en el ring”.

Bret: Hart: “Aprendí mucho viniendo a Puerto Rico. Cuando empecé, realmente aprendí a luchar. He aprendido. Sobre todo aprendí cómo caer, cómo protegerme y cómo no lastimar a mi oponente. Tomé tal vez seis meses de entrenamiento de lucha libre. Tuve dos luchas, y también sé que estaba en un avión y estaba en Puerto Rico. Sabes que hay mucho más en la lucha libre que aprender a atar y a caer y aprendí mucho en los tres meses que estuve en Puerto Rico. Aprendí tanto que me impulsó cuando llegué a Canadá para ayudarme a convertirme en una estrella más grande. Creo que aprendí tanto en esos primeros tres meses en Puerto Rico que pude seguir en la lucha libre y nunca me di por vencido en mi carrera porque creo que lo que aprendí en Puerto Rico, más que nada, fue que aprendí a creer en mi mismo. Y al volver, recuerdo ser un joven que no necesariamente creía en sí mismo, no pensaba que iba a ser un luchador. Ni siquiera sabía si quería ser luchador. Y luego, cuando dejé Puerto Rico, era un tipo que quería ser luchador y lo iba a hacer. Me hice una promesa. Juro que esto es cierto, solía salir a las rocas en el océano, aquí afuera en la playa y sentarme en las rocas y recuerdo mirar hacia el cielo y decirme a mí mismo que no quiero ser solo un luchador. Quiero ser el mejor luchador de todos los tiempos. Quiero ser el mejor luchador. Quiero ser campeón del mundo. Voy a luchar por todos los diferentes territorios y voy a ser un campeón. Voy a enorgullecer a mi padre. Recuerdo haberme hecho esta promesa, que no tenía ninguna razón para hacerla. No, no hay ninguna razón para que me haya hecho este tipo de promesa porque no fue nada en mi futuro lo que hizo que pareciera que eso iba a suceder. Pero obtuve mi confianza aquí en Puerto Rico y volviendo aquí hoy y simplemente conectándome con algunas de las caras viejas y los fanáticos, me encanta ver a mis fanáticos y siempre tengo muchos fanáticos geniales aquí en Puerto Rico”.