El domingo 26 de enero en Houston, Texas se celebró el Royal Rumble 2020. Dentro del Minute Maid Park, para más de 47 mil aficionados, uno de ellos de Planeta Wrestling, se vió uno de los eventos más grandes del año para WWE. Te dejamos aquí la crónica de lo vivido dentro del evento.
La cartelera
Primero tuvimos el Kickoff Show, que al igual que en todos los eventos fue bastante sencillo y poco emocionante. Lo mejor sin duda, fue Andrade defiendendo el campeonato en contra de Humberto Carrillo. Un gran ejemplo de lucha libre estilo mexicana, pero para estas estancias el público presta poca atención y es difícil cautivarlos.
Al ritmo de las cervezas y los nachos, comenzaba el evento. Roman Reigns en contra del Rey Corbin en una lucha donde las caídas cuentan donde sea. Una lucha que como aficionado es mejor ver en televisión, muchas partes de la lucha las tenías que ver en la pantalla porque no se alcanzaba a ver la acción. Ha decir verdad, desde mi posición pude ver casi todo el desenlace y el final de la lucha, simplemente fue suerte porque del otro lado era imposible ver que pasaba.
Royal Rumble Femenino
La lucha anterior, dio pie a la batalla real femenina; tendríamos a 29 mujeres y a un hombre vestido de mujer. La lucha tuvo altibajos, en los que de repente se perdía el ritmo y la gente perdía un poco de interés. Fue increíble ver el regreso de superestrellas como Kelly Kelly y Molly Holly, pero sin duda alguna la mejor ovación fue para Santina Marella y la eliminación de Lana. Santina se autoeliminó de lucha pero generó una parte de comedia para la lucha. Finalmente, Charlotte Flair se llevó la lucha, con un final un tanto confuso, porque parecía que estaba esperando a Sahyna Baszler para eliminarla mientras ella se sostenía de las cuerdas. Ha decir verdad, por momentos se extrañó a Sasha Banks y la gente aclamaba por ella, aún no se sabía de su lesión.
Seguidamente, vino la lucha entre Bayley y Lacey Evans. Increiblemente, la mayor parte de la lucha la gente estuvo en silencio y fue cuando más se pararon a reabastecerse de comida y cerveza. Lucha bastante mediocre, con un final anticlimático, se llevaron el aplauso por puro respeto.
Por lo contrario a la anterior lucha, la ovación durante la lucha de The Fiend contra Daniel Bryan fue impresionante. Por un momento, todos creíamos que Bryan se iba a llevar la lucha y nos olvidamos de lo fuerte que puede llegar a ser The Fiend. El aplauso sin duda se lo llevó Bryan al unísono, otro gran performance de su parte.
Previo al Royal Rumble, tuvimos la aparición de Becky Lynch en contra de Asuka. Increíble, como la gente ama a Becky Lynch, ensordecedora su entrada así como su salida después de retener el título. Muy a lo lejos se escuchaban abucheos y cánticos a favor de Asuka. Se podrá decir lo que sea de Lynch pero es la luchadora más mediática del momento y es la que más mueve a las masas.
Royal Rumble
Con unas cuantas cervezas encima, comenzó el evento principal y a lo que todos habían pagado su boleto. Entraba Brock Lesnar como número 1, imponente y bestial. Él se encargo de sacar a los primeros 13 luchadores que entraban sin si quiera un rasguño. Dentro de esos 13, la gran ovación se la llevó Keith Lee que parecía que podría hacerle frente a la “Bestia Encarnada”, lamentablemente no lo logró. Llegó el mágico número 16, entre gritos y algarabías entraba Drew McIntyre, otro que tendría la capacidad de eliminar a Lesnar. En cuestion de segundos dentro del ring y con ayuda de Ricochet, McIntyre eliminó a Lesnar. En este momento, el estadió explotó de emoción, por mi parte después de una gran decepción fue el momento de mayor felicidad que he sentido en un evento deportivo.
Continuó la lucha, los ánimos seguían altos, llego el número 21 y se escuchó la música de Edge. La emocíon llegaba niveles estratosféricos, los rumores eran ciertos y una leyenda regresaba al ring después de 9 años de ausencia. Edge llegó hasta el final de la lucha y fue eliminado por Roman Reigns que se llevó uno de los abucheos más duros de la noche.
Finalmente, Drew McIntyre eliminó a Reigns después de acertar una Claymore. Los aficionados nos llenamos de alegría y júbilo. McIntyre hizo el mítico señalamiento hacia el cartel de Wrestlemania y así termino el primer evento del año de WWE.
En conclusión, puedo decir que el Royal Rumble fue una montaña rusa de emociones. Por momentos me tuvo en el piso y después me llevó a la cima. Es totalmente recomendable ir a un evento así de grande con tal de vivir una experiencia así. Indudablemente se vive mejor que cuando solo lo ves por T.V.
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