El ex campeón de WWE solo le falta el campeonato de los Estados Unidos para llegar a ser un Grand Slam champion. Lo adelantaba el luchador en el último programa de Raw, pero lo cierto es que todos los reportes indican que el futuro de Drew está lejos de la marca roja.
Después de convertirse en el campeón de la pandemia, ser la cara de la empresa durante los momentos más complicados ha hecho que para la WWE sea un pilar fundamental en sus planes de futuro ahora que la gente puede disfrutar de nuevo de los eventos en vivo muy cerca de sus idolos.
No solo esto, hay que destacar que después de no poder tener más oportunidades por el campeonato de Bobby Lashley todo parece ir encaminado para viajar en el draft a SmackDown en el mes de octubre. Si esto llega a suceder son los retos los que van a determinar su futuro dentro de WWE.
Ahora, después de vencer a Jinder Mahal en WWE SummerSlam, Drew McIntyre espera pasar a su próximo gran capítulo en WWE y le dice aSports Illustratedque si el próximo gran capítulo viene con un movimiento a SmackDown para enfrentar a Roman Reigns, él está listo. para ello.
“Tuve la oportunidad de ayudar a consolidar a Bobby como campeón, y hacer eso para un artista de alto nivel fue un honor”,dice McIntyre.“Estoy muy feliz por él, es alguien que se ganó y merece todo su éxito. “SummerSlam fue un lugar difícil, salió justo después del regreso de Becky, pero fue una oportunidad para hacer una declaración contra Jinder. Pudimos tener ese momento frente a tanta gente, lo cual fue un honor, y ahora estoy emocionado de ver lo que viene después. Fue genial en Raw estar involucrado con Damian Priest, Lashley y Sheamus, que son tres atletas muy físicos. Quiero establecer el tono de la fisicalidad en WWE, y estoy emocionado [con] la próxima historia. Eso es lo que la gente siente y toca las emociones. Estoy buscando algo bueno, y si es Roman, espero que esté listo “.
Si analiza el propio luchador una rivalidad con el campeón universal se muestra muy enérgico para aceptar el reto. Desde que debuto Drew tras su vuelta ha tenido varios combates contra Roman y siente que esto puede ayudar a desarrollar sus personajes y sobre todos hacer sentir a los aficionados que es algo personal.
“Eso es algo en lo que me encantaría hincar el diente, y es algo que, inevitablemente, sucederá”, dice. “Pasamos menos de una semana juntos el año pasado, pero la química, incluso sin aficionados en las gradas, fue real. Roman es mi mayor enemistad desde que regresé a la WWE, y siento que he tenido más combates con él que con nadie, pero ahora se siente diferente. Los roles han cambiado por completo y estás viendo quiénes somos como personas reales. Hay algo importante en el futuro para nosotros “.
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